Tenía 73 años
Adiós a Pau Riba
La Sociedad de Artistas AIE desea expresar sus más sentidas condolencias a familiares, amigos, colegas y demás allegados de su socio Pau Riba, legendario cantautor que ha fallecido este domingo en su masía de Tiana (Barcelona). Pau Riba ha sido uno de los artistas más influyentes de la música en catalán desde sus inicios. Abanderado de la contracultura tanto en sus canciones y puesta en escena como en su actitud vital, Riba ha marcado a varias generaciones de artistas.
Cantautor, rockero, cantante, melódico, independiente, alternativo, Pau Riba es el más iconoclasta de los artistas españoles. El veterano enfant terrible de la canción catalana dio el pistoletazo de salida en Madrid en 1996 a la tercera edición del programa AIEnRUTa-Artistas con «La gallina profiláctica y olé» sobre el escenario del Galileo Galilei.
Tildado de terrorista cultural o de rara avis, Pau Riba es un insaciable experimentador de emociones. Inició su andadura en los sesenta, en los albores de la cançó catalana, pero nunca se alió del todo al movimiento. Riba se decantó pronto por exponer sus ocurrencias a través de los vericuetos del rock progresivo. A su manera, era un Zappa catalán, y enseguida se metió a participar en cuanta movida underground se generara en España. Cualquier cosa podía ocurrir, en un concierto suyo, en aquellos imaginativos años.
Con sus peculiares maneras, Pau Riba se enfrentó al rock anglosajón. La audacia de los Lou Reed, Iggy Pop, Fran Zappa o David Bowie de entonces era casi irrisoria para los atrevimientos de este artista en un entorno tan hostil como los años de la transición democrática española.
Convertido en trascantautor, criticó a los cantautores de su generación, se inmiscuyó en el teatro y llegó a hacer de doña Inés en un irreverente Tenorio, picó en el cine interviniendo en Bajarse al moro y Orquesta Club Virginia, y llegó a mostrar espectáculos alternativos durante los Juegos Olímpicos de Barcelona.
Hijo de poetas de clase acomodada, Riba inició su trayectoria a finales de los años sesenta colaborando con Grup de Folk y publicando poco después el mítico e influyente álbum «Diòptria», uno de los más reivindicados desde su lanzamiento –en dos partes en 1969 y 1970–.
Pero aunque siempre se acude a ese trabajo a la hora de hablar de Riba, el artista nacido en Mallorca jamás dejó de publicar discos, actuar en directo con diversas formaciones de acompañamiento, escribir o incluso aparecer en películas. Su legado incluye varios libros y discos tan emblemáticos como el ya citado «Diòptria», «Jo, La Donya i El Gripau» (1971), «Licors» (1977), «Disc dur» (1993) o «Mosques de colors» (2013, en colaboración con Pascal Comelade).
Gracias al espíritu transgresor de toda su trayectoria, Pau Riba ha sido uno de los artistas en lengua catalana que más han influido a generaciones posteriores y son pocos los grandes nombres actuales de la escena independiente que no citen a Riba entre sus referentes.
Riba también era padre de varios hijos, entre ellos Caïm y Pauet Riba, quienes fueran miembros de la banda Pastora.